ADIOS PRINCESA . LA ÉTICA PERDIDA.1

Independientemente de la calidad humana que se necesita para escribir un libro que merezca la pena al lector , que es quién al final decide con su intención de lectura , su compromiso dinerario,y su tiempo, hay que escribirlo con un punto mínimo de respeto. Y la editorial que se precie en imprimir un libro ,y los gestores deben saberlo , o hacerselo saber los empleados,salvo que no importe nada más que el ahora , el aqui te pillo aquí te mato , tomas un cerro de palabras amontonadas, las deshaces y las vendes sin darte cuenta ( porque el escritor es un enfermo, y en este caso su paranoia es supina, por no decir que sufre de Hipodensidades cerebrales , pérdida aguda de memoria, junto a claras alteraciones del lenguaje, alheimer de la moral propia y ajena . ) El señor abogado, que ejercía de primísimo( qué raro que aporte unas fotos todas publicadas excepto , 1, ó 2, . que muestre certificados que cualquiera puede conseguir en el registro civil -además las copias que saca son gratuitas , es decir , este señor está pelado y no ha encontrado otra cosa que hacer con su vida que traicionar a su hermana y media familia por cuatro euros a la espera de ir a los programas más basura. Erika no puede defenderse. Decir cualquier cosa de La Casa Real hoy no es noticia.Hoy es un blanco fácil, que por supuesto nunca voy a defender.Letizia será siempre para mi la estudiante aquella. La vida de la Princesa no la conozco.Como tampoco sé nada de otros muchos periodistas reconocidos cuando antes querían serlo.Es decir , sé lo suficiente de la vida que llevan porque el pasado es inmutable,porque hay conexiones duraderas,y porque Madrid es muy pequeño. Cada editorial como cada cadena de tv son empresas con ánimo de lucrarse a conciencia .Pero no por ello deben vender cualquier falsedad como oro porque eso es delito, aquí, y en la Patagonia Rebelde*.es por eso que el consejo editorial, debe decidir y censurar cuanto sea preciso, primero por no perder de vista lo conseguido durante años y cientos de libros, un prestigio que es fácil de perder con libros como éste del que hablamos. La Patagonía Rebelde, escrito por el argentino Oswaldo Bayer, en la editorial Planeta ( que ya hace tiempo ha perdido prestigio al ganar lectores, tiene en cambio mi reconocimeinto al no querer jamás atreverse a publicar un libro donde prevalezca la descarnación de las personas ante la ansiedad enfermiza del público pidiendo más sangre, el linchamiento en directo, y su deleite ante los ahorcados. Chema Rubio V